Bad for your Eyes worst for your Soul

(Lo prometido es deuda, aquí está... la promesa que le hice al tipo que habla con las paredes. -eso dice mucho de su conversación :P- cursi time in Machiwi zone!)

ADVERTENCIA: La siguiente entrada proviene de los oscuros recovecos de la mente de Cuatro, algo que él se atreve a llamar literatura, "Machiwi" no se hace responsable por las repercusiones que el documento pueda tener en su mente.

--------------------------------------------------------------------------------------------
Volví a perderme en tus ojos. Te lo había dicho ya… ¿No? Siempre me fijo en los ojos de las personas. Más que sus cuerpos, palabras o acciones, sus ojos son lo único verdadero. Aprendí esto hace mucho tiempo y me he vuelto un maestro de la inmersión. Veo unos ojos interesantes y entro en ellos, como un rayo de luz o como una imagen lo haría.

Nado en mares negros, en lagos azules, en océanos verdes. Entro en cuevas opacas, ambarinas o deslumbrantes. Busco el fondo de cada uno de ellos, siento, huelo, toco lo que hay dentro de cada uno de ellos y salgo, a veces decepcionado, a veces impresionado. Siempre como un ladrón que se lleva lo más preciado de los mismos, sus secretos más recónditos.

En ocasiones, no salgo tan fácilmente. Algunas veces, lo que descubro es tan inmenso, tan grande y tan complejo que me pierdo y no encuentro la salida. Eso nada más me ha pasado con tres personas. Unos ojos oscuros como la noche, pero rematados del brillo de extrañas estrellas, que eran tan peligrosos que casi no escapo de ellos. Otros ojos claros como aceite pero tan profundos, que no me atreví a entrar en ellos y a pesar de eso, me fue difícil salir de los mismos.

Finalmente, tus ojos. Esos ojos que no tenían color, porque cambiaba siempre. Esos ojos que nadie conocía, porque nadie había superado la trampa inicial. Se nota cuando unos ojos no han sido explorados, no han sido tocados ni por nada y ni por nadie. Se puede decir por el color de la córnea. Entre más personas han entrado a unos ojos, se ven turbios, descoloridos.

Aquellos ojos, no eran así. Se veía que algunos habían entrado, pero sin tocar nada como si respetaran el contenido de ese infinito. La primera vez que entre, lo hice con reverencia y temor. Cuando pensé que lo había logrado, vi que eso no era más que un fondo falso, en realidad nadie había entrado a tus verdaderos ojos.

Durante días intente abrirme camino a través de esa barrera. Iba haciéndolo poco a poco, trabajando como un experto ante la mejor caja fuerte del mundo. Te fui conociendo en ese tiempo, conocí tu voz, tus movimientos, tus palabras… pero al igual que todos eran falsos. Esa no eras tú.

Después de un tiempo y gracias a mi trabajo logré lo que me proponía, logre abrir la puerta falsa. Lo hice tan bien, que nadie podría notar que he entrado. Lo que vi me dejo sin aliento. Había mares, cuevas, lunas, soles y seres ahí. Había flores, luces, música, personas y lugares ahí. Salí de tus ojos y me retire, asustado.

A partir de ese día, abría aquella puerta, veía algo diferente, pero no me atrevía a pasar. No había forma de asegurar que volviera a salir de ahí. Sin embargo, dentro de ese lugar, estabas tú y todo lo que eras tú, por lo que está vez entre.

Corrí por todas partes, mirando todo, aprendiendo todo, conociendo todo… Cada vez más y más profundo, hasta que no supe donde estaba. Decidí regresar, salir de ese lugar, pero al dar la vuelta, comprendí que la puerta se había cerrado.
En ese instante, comencé a buscarte en tus ojos. ¿Cuántos días llevo aquí? No lo se. ¿Te encontraré alguna vez? ¿Saldré de aquí? Ya no importa. Lo único que importa, que me duele y que me asusta, es que a pesar de estar en tus ojos, tú no me has visto ni una vez.

------------------------------------------------------------------------------------------

Nos vemos después, estoy a punto de entrar en la super semana de finales, si llego a sobrevivir les contare sobre otro tipo de pasillos que surgen en esta temporada.


Suerte (Para mi y para todos)